PREVENCIÓN DEL ABSENTISMO Y EL FRACASO ESCOLAR
En marzo finalizó en el IES Jaime Ferrán Clua un taller de Arte –terapia dirigido alumnado de PMAR y a finales de mes comenzó otro taller de Teatro Social con alumnado de ACE de nuestra zona, estas son algunas las actuaciones que el Ayuntamiento de San Fernando ofrece a los Institutos del Municipio para la prevención del absentismo a través de la mejora de la motivación y la auto-percepción.
COLABORACIÓN INTERADMINISTRACIONES
Las Concejalías de Educación y Juventud apuestan por trabajar de forma coordinada en el contexto del convenio interadministrativo de colaboración entre la comunidad de madrid, Consejería de educación e investigación, y el Ayuntamiento de San Fernando de Henares para la prevención y control del absentismo escolar, cuyo objeto es establecer la colaboración entre ambas administraciones, para prevenir y controlar el absentismo escolar del alumnado escolarizado en San Fernando de Henares, para ofrecer a los IES de San Fernando de Henares colaborar conjuntamente con ellos para intervenir en la prevención del absentismo y el fracaso escolar.
Por las razones que fundamentamos a continuación, proponemos a los IES intervenir en horario lectivo con los grupos más vulnerables. El objetivo de estos talleres es fomentar el desarrollo de la motivación intrínseca y mejorar su auto percepción de forma que facilite su continuidad y éxito en el sistema educativo para al menos finalizar y titular en la Educación Secundaria o en FPB y prevenir el absentismo y el fracaso escolar.
El absentismo escolar repercute directamente en los resultados académicos. Los datos del Informe PISA revelan que este problema es especialmente llamativo en España. El 24,7% de los estudiantes españoles de 15 años que participaron en las pruebas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) reconoce haberse saltado un día entero de clase al menos una vez en las dos semanas anteriores a realizar los exámenes. El porcentaje se encuentra por encima de la media de la OCDE, que es del 19,7%.
El estudio ha analizado cómo afecta a los resultados académicos el absentismo escolar y ha llegado a la conclusión de que el alumnado español que faltó a clase al menos un día en las dos semanas previas a la realización de las pruebas obtuvieron 36 puntos menos en Ciencias que los que no faltaron.
«El absentismo daña a la clase entera», insiste el Informe PISA. «Si el estudiante llega tarde o se pierde colegio y requiere atención adicional del profesor, el ritmo de la clase se interrumpe y el resto de compañeros/as sufren las consecuencias. El absentismo también puede generar un efecto imitativo, así como resentimiento en los que van a clase con regularidad».
En 2018 de los países de la Unión Europea fuimos el país con mayor tasa de abandono escolar, la media fue de 10,6%.
FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA Y PEDAGÓGICA DEL PROYECTO
Los aspectos psicosociales integrados en una serie de características y comportamientos que en mayor o menor grado están presentes durante la adolescencia, y que son importantes reconocer para poder entender:
- Búsqueda de sí mismos y de su identidad, necesidad de independencia.
- Tendencia grupal.
- Evolución del pensamiento concreto al abstracto. Las necesidades intelectuales y la capacidad de utilizar el conocimiento alcanzan su máxima eficiencia.
- Manifestaciones y conductas sexuales con desarrollo de la identidad sexual.
- Contradicciones en las manifestaciones de su conducta y constantes fluctuaciones de su estado anímico.
- Relaciones conflictivas con los padres que oscilan entre la dependencia y la necesidad de separación de los mismos.
- Actitud social reivindicativa: en este período, los jóvenes se hacen más analíticos, comienzan a pensar en términos simbólicos, formular hipótesis, corregir falsos preceptos, considerar alternativas y llegar a conclusiones propias. Se elabora una escala de valores en correspondencia con su imagen del mundo.
- La elección de una ocupación y la necesidad de adiestramiento y capacitación para su desempeño.
- Necesidad de formulación y respuesta para un proyecto de vida.
Si al hecho de que el joven adolescente se encuentre en una fase cambios físicos, psicológicos, biológicos, intelectuales, sociales y emocionales unimos que se encuentra en un momento de transición de la etapa educativa de primaria a secundaria, se puede considerar el riesgo de que presente falta de motivación e implicación en el estudio, fracaso escolar y riesgo de abandono del sistema educativo.
Pero la adolescencia no es solo una etapa de vulnerabilidad sino también de oportunidad, es el tiempo en que es posible contribuir a su desarrollo, a ayudarla a enfrentar los riesgos y las vulnerabilidades, así como prepararlos para que sean capaces de desarrollar sus potencialidades.
Por este motivo nos parece imprescindible trabajar ciertas áreas como pueden ser la motivación y la auto-percepción en la adolescencia para prevenir ciertas conductas de riesgo como puede ser el absentismo que abre el camino al fracaso escolar.
La motivación intrínseca podría definirse como el deseo propio de buscar cosas nuevas y nuevos retos, para analizar nuestra capacidad, observar y adquirir más conocimiento. Está impulsada por un interés o placer por la tarea en sí misma, y reside en el individuo en lugar de depender de presiones externas o el deseo de recompensa.
La motivación intrínseca es una tendencia motivacional natural y es un elemento fundamental en el desarrollo físico, social y cognitivo.
Las personas que están motivados intrínsecamente participan en la tarea de buen grado, y trabajan para mejorar sus habilidades, lo que incrementará, a su vez, sus capacidades. El alumnado tienen más probabilidad de estar motivados intrínsecamente si:
- atribuyen sus resultados académicos a factores que están bajo su control, también conocido como autonomía
- creen que tienen las habilidades para ser agentes eficaces en el logro de sus objetivos deseados, también conocido como creencias de auto eficacia
- están interesados en dominar un tema, y no solo en conseguir buenas notas.
La Auto-percepción. La especie Humana es la que tiene la capacidad de percibirse a sí misma, el desarrollo de nuestra autoimagen y auto concepto comienza desde la niñez en el seno familiar en parte y con las experiencias e información que asimilamos del entorno.
Dentro de este proceso influyen las experiencias personales, la información que recibimos de los demás e incluso la autoimagen que adopta nuestro núcleo familiar y nuestros ámbitos de pertenencia.
Las exigencias psicosociales que a través de los medios de información recibimos son un factor importante en este proceso de conformación de la autoimagen, así como los deseos e inclinaciones personales y conscientes respecto al rol que deseamos ocupar en la vida.
A través de esta capacidad podemos reconocer en nosotros virtudes y defectos y percibir nuestro estado afectivo. El producto de la auto percepción es subjetivo y puede tener una discrepancia con la realidad, o sea que podemos tener un concepto propio desvirtuado de lo que realmente somos.
Mediante la capacidad de auto percepción y mediante nuestro auto concepto interpretamos subjetivamente aspectos propios que influyen en la relación con los demás y en la percepción de cómo podemos incluirnos en la sociedad. Un auto concepto de propio desviado de la realidad y establecido como un patrón inflexible genera una mala adaptación en las relaciones interpersonales y en la sociedad.
Valencia (22-07-2015).- La Universidad Internacional de Valencia (VIU), ha realizado un trabajo de investigación del que se extrae la “necesaria” implementación de la Educación Emocional en el currículum para aumentar las tasas de rendimiento académico y reducir tanto el fracaso como el absentismo escolar, ya que en España 3 de cada diez alumnos (28%) faltan un día o más sin justificar sus ausencias, el doble que los países de la OCDE (15%).
El estudio “La inteligencia emocional: una herramienta clave para la motivación del estudiante y su rendimiento”, elaborado por las profesoras Mª Estrella Alfonso y Cristina Gabarda, sostiene que las limitaciones en el desarrollo emocional del alumno se asocian a un bajo rendimiento académico, a procesos de fracaso y abandono escolar.
En este sentido, el trabajo señala que la tasa de absentismo escolar es una de las claves para evaluar la calidad del sistema educativo y, al respecto concluye que en nuestro país el índice de población que nunca falta al colegio es de poco más del 70%, muy por debajo de la media internacional del 85%.
En esta línea, la investigación realizada subraya que el absentismo escolar puede tener repercusiones directas sobre un posible abandono del sistema educativo, llegando incluso a “romper definitivamente con él”. Tanto es así, que los alumnos escolarizados en centros con una alta proporción de estudiantes que falta de forma recurrente a alguna clase (absentismo no justificado) “tienden a obtener un peor rendimiento” (PISA 2012).
El estudio ahonda en las circunstancias que incentivan tanto el absentismo como el abandono y fracaso escolar y, al respecto, sostiene que la implantación de la formación emocional en los planes de estudio aumentaría la motivación y por lo tanto, permitirá al alumno orientarse en la consecución de las metas y poner en marcha una serie de recursos personales que le permitan alcanzarlas.